Clase de Skincare Primavera/Verano
Conoce tu piel y establece metas claras para tu rutina de cuidado.
Introducción:
Estoy muy feliz de que estés aquí y quiero felicitarte por dar este primer paso hacia una piel sana y una vida saludable que se refleje en cada parte de ti.
Permíteme presentarme: Mi nombre es Marwil Zapata; hija, esposa, madre, médica, y una apasionada por el bienestar:
Médica cirujana de profesión con especialidad en salud antienvejecimiento y longevidad. Mi camino hacia el bienestar no fue una vocación inicial, sino una lucha personal contra el acné, la inseguridad por el sobrepeso y la presión social en Venezuela por la apariencia perfecta.
Lo que comenzó como curiosidad y autocuidado, tratando de mejorar mi cuerpo y mi piel, se transformó en una vocación hacia el verdadero concepto de salud. Me di cuenta de que una piel radiante no es solo el resultado del skincare o de tratamientos estéticos, sino un reflejo de cómo están mi espíritu, alma y cuerpo.
Tras graduarme de médica cirujana en 2010, realice un diplomado en medicina antienvejecimiento en 2015 que me encamino a mi propósito. Comprendí la regeneración celular, la epigenética y, sobre todo, una verdad clave: la piel no se trata solo desde afuera, se transforma desde adentro.
Con más de 15 años de experiencia, fundé Más Longevos. Hoy, mi enfoque combina la medicina antienvejecimiento, la estética y el bienestar, desarrollando programas que enseñan a la gente a cuidarse de adentro hacia afuera, basándome en cuatro pilares: Descanso, nutrición, gestión emocional y hábitos conscientes. Mi misión es mostrar que una vida longeva se manifiesta en la piel y en todas las áreas de la vida.


¿Qué le pasa a mi piel en primavera?
Con la llegada de la primavera, tu piel entra en un nuevo ambiente: más sol, más polen, más calor y más humedad. Estos cambios impactan directamente en su equilibrio, por eso es fundamental rotar tu rutina de skincare. Lo que servía en invierno puede resultar pesado o insuficiente en esta estación.
Pero para establecer una nueva rutina debes tener claro 3 puntos.
Tipo de piel para saber que necesita ahora: Conocer el producto ideal para esta temporada debes conocer tu tipo de piel, de aquí parte. Si necesita limpiadores suaves o seborreguladores, si necesitas nutrir o hidratar.
Objetivos reales y con propósito (1 o 2 objetivos): Debes establecer un objetivo inicial para elegir productos que trabajen en mejorar ese problema, ejemplo; Manchas y grasa usar niacinamida, manchas y sol usar vitamina C.
Presupuesto inicial y mensual: Cuando comienzas con una rutina de skincare la inversión en más alta que el mantenimiento mensual, porque inicialmente debes invertir en todo (jabón, cremas, serum y protector solar). Luego solo en ir reponiendo lo que se va gastando y es menos pesado. Debes tener el cuenta que la inversión inicial en la rutina es de aproximadamente $60.000 a $100.000 dependiendo las marcas que uses. Esto esta más detallado en la guía descargable.
¿Qué tipo de piel tienes?
Lo más importante es entender que tenemos distintos tipos de piel, por eso el mismo producto no funciona igual en todos. Aprende a identificar qué tipo de piel tienes.
Objetivos y presupuesto
No puedes puedes cubrir todos los objetivos con una misma rutina, debemos ir un paso a la vez, siempre es bueno comenzar con un objetivo y enfocar todo el presupuesto en ese objetivo, Ejemplos;
- Grasa
+ Hidratación.
+ Humedad.
- Granos
- Arrugas
- Manchas
+ Nutrición y renovacion
+Brillos y lozanía
- Líneas de expresión
- Hiperpigmentación.

Clase Parte #1
Cuando empezamos a cuidar nuestra piel es importante conocer nuestro tipo de piel, definir mis primeros objetivos y establecer un presupuesto. Esto es el punto de partida para comenzar una nueva rutina de skincare. Lo primero que siempre recomiendo es entender porque debemos cuidar nuestra piel en primavera, que cambios atraviesa nuestra piel durante esta estación y como podemos prevenir la mayor cantidad de daño.
Sección de hábitos
Dormir profundamente (7–8 horas): El sueño es el “tratamiento antiage más barato”: durante la noche la piel se regenera, produce colágeno y se reparan daños de los rayos UV.
Hidratación interna: Beber suficiente agua (1.5–2 L diarios). Puedes usar infusiones frescas sin azúcar (pepino, menta, jengibre).
Alimentación rica en antioxidantes: Frutas y verduras de temporada (frutillas, espinaca, tomate, arándanos).
Ejercicio regular y al aire libre: Mejora la oxigenación, circulación y brillo saludable. En primavera: ideal caminar.
Gestión del estrés: Hábito: 5–10 minutos diarios de respiración, meditación o journaling.
Higiene del sueño digital: Evitar pantallas 1 hora antes de dormir. La luz azul nocturna altera la melatonina y disminuye la reparación celular nocturna.


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La alimentación es la clave
La rutina de cuidado facial es importante, pero si no cuidas lo que comes tu piel seguirá inflamada y no verás mejoría.
Alimentación antiinflamatoria:
Caldos de pata de pollo o res (colágeno natural y glicina).
Eliminar ultraprocesados, lácteos y azúcares refinados.
Favorecer: omega 3 (chía, linaza, pescado azul), vegetales verdes, frutas ricas en antioxidantes (arándanos, granada), cúrcuma, jengibre.
Suplementos sugeridos: omega 3 y vitamina C. (Si estas embarazada o en periodo de lactancia consulta a tu médico por unos suplementos ideales para ti en esta etapa.
Alimentos que activan la rosácea.
Lácteos: pueden obstruir la glándula sebácea, favoreciendo la aparición de granos y que no responda la piel a la rutina de skincare.
Picantes: alteran la circulación dérmica, lo que incrementa el enrojecimiento e inflamación. Ademas de las molestias en la piel.
Embutidos: aumentan la carga de grasas saturadas y conservantes, elevando el riesgo de infecciones dérmicas. Altera la microbiota.
Chocolate: estimula la actividad de las glándulas sebáceas, generando mayor producción de grasa.
Falta de agua: una hidratación deficiente acelera el envejecimiento cutáneo y disminuye la capacidad de reparación de la piel.
